Cuéntanos tu historia de pan dulce
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Sin duda, el pan dulce es una tradición que ocupa un lugar importante en nuestras vidas. Desde las famosas conchas que saben mejor acompañadas con café de olla, hasta las deliciosas orejas en forma de corazón, cada pan forma parte de nuestras mañanas y de nuestras ocasiones especiales. KCET quiere saber tu opinión. ¿Cómo se ha convertido el pan dulce en parte de tu vida?
Empezaré yo.
Cuando la pandemia estaba en su punto más crítico, el pan dulce fue un refugio para mi pequeña familia de cuatro personas. No podíamos salir a reuniones con amistades, pero sí podíamos salir a pasear un poco por la ciudad, comiendo deliciosos bocados de panaderías cercanas. Pronto, la Monarca en Hollywood se convirtió en nuestra salida favorita los fines de semana. Comprábamos una caja variada de pan dulce que incluía mini conchas, rollos de canela, taquitos y cuernitos. Cada mañana elegíamos un pan diferente para desayunar, así que esa cajita nos duraba hasta una semana. Ahora, cada vez que veo esa inconfundible mariposa naranja, recuerdo que en momentos tan difíciles pude encontrar un poco de alegría en una caja de dulces horneados.
Te toca a ti. Comparte tu historia con el pan dulce en este formulario de Google. Nos emociona que nos cuentes tu historia.
Acerca de esta historia
Este artículo forma parte de un gran número de historias que reflejan la forma en que el pan dulce se ha convertido en parte de la cultura del sur de California, permitiendo que la gente se conecte con tradiciones arraigadas y sabores caseros. Encuentra más historias del universo del pan dulce en esta colección.
Escrita por Juliana Duque Mahecha. Audio y video de Paula Kiley. Ilustraciones de Henry Cram. Fotografía de Justin Cram, Henry Cram y Paula Kiley. Editado por Carren Jao, Carla Pineda y Victoria González. Agradecimiento especial a Carla Pineda y Melissa Arellano por la entrega de pan dulce.
